Abrázame

 

 

Cuando me veas caído,

derrotado, hundido,

llorando.

Cuando me veas así,

lleno de miedos,

de angustias,

y de tristezas,

no me pidas nada.

Por favor, no me pidas nada.

 

No me pidas que me levante y camine,

No me pidas que no llores porque los hombres no lloran,

Ni que me comporte como una persona adulta.

No me exijas que sea fuerte.

 

No soy, ni quiero ser, esa persona adulta.

No soy ese hombre fuerte que todo lo puede,

que nunca se derrumba,

que no llora,

que no se cae,

que finge ser.

 

No, a veces el niño aparece

y entonces siento miedos,

tristezas,

abandonos,

me siento desvalido

y perdido.

 

Cuando me veas así,

en esa noche oscura del alma

solo siéntate a mi lado,

seca mis lágrimas,

si quieres llora conmigo,

mírame,

y sobre todo

abrázame.